sábado, 20 de julio de 2013

Las cartas de los Elfos, las Hadas y los Duendes. Tiziana Mattera.

Esta obra de Tiziana Mattera está formada por un libro de 208 páginas y por 55 cartas bellamente ilustradas con imágenes de Elfos (10), Hadas (16) y Duendes (29).

Las cartas son muy manejables (8 x 11 cm) y de agradables ilustraciones: los Elfos y las Hadas tienen un aspecto etéreo, mientras los Duendes resultan más mundanos, logrando en ambos casos transportarnos a su mundo mágico.

Los Elfos, Hadas y Duendes son los llamados Tuatha na Sidhe “gente del Mundo de Luz” y por medio de estas cartas nos transmiten su mensaje para ayudarnos y guiarnos en nuestro camino interior. Podemos pues utilizarlas a modo de oráculo, extrayendo una de ellas cuando necesitemos consejo.

El libro, tras una introducción, se centra en describir estos seres de luz comenzando con una frase en clave poética a modo de presentación, para desarrollar luego 4 apartados:
-        Significado del nombre
-        Lugar de procedencia
-        Mensaje
-        Sugerencia

Estamos ante una obra de contenido espiritual y con una sutil carga poética, en la que la autora nos invita a ver con los ojos del corazón y mirar hacia dentro, pues así encontraremos otra realidad llena de magia y descubriremos que nuestros sueños pueden y deben hacerse realidad. Aunque personalmente considero que es en su siguiente obra “Las cartas de las dríades” donde la autora logra plenamente su objetivo, estas cartas de los elfos, las hadas y los duendes suponen un agradable soplo de aire fresco, su mensaje es claro y están impregnadas de un halo poético que nos traslada al Mundo de Luz.

Así se nos presentan algunos de los seres de Luz:

El Elfo Owl,




“Perderse en los sueños
para vagar en el corazón iluminado de la noche.
Unirse a su aparente silencio
para escuchar los susurros de la vida oculta
y vibrante de armonía.
Fundirse en su intimidad para abrir el corazón a la quietud.
Detener el curso de los pensamientos
para acoger el dulce desconcierto
del presente instante que goza en la eternidad”.

El Hada Blume,



“Quisiera enseñarte esa sonrisa tuya que aún no conoces…
esos pensamientos ocultos en tu corazón
y que no osan salir y escuchar la suave voz que murmura
tu nombre. Es la semilla arrojada que espera
y promete el perfume de la flor.
Para decirte que aquello que buscas
está dentro de ti y te espera…”.

Y el Duende Wizen,



“He salpicado el cielo
de nubes oscuras
para obligarte a levantar la mirada
y buscar el Sol…”.


Alguno de sus mensajes:

“Me gustaría hablarte del silencio y de su reino (…) allí es donde tu corazón te habla y puede contarte quien eres realmente. ¿Qué temes descubrir?”.


Y una sugerencia:

“Recuerda que has venido a la Tierra con un don entre las manos. Tan solo debes aprender a reconocerlo y a aceptarlo con humildad y con gratitud, porque este don representa tu especialidad; una especialidad única e irrepetible, gracias a la cual podrás elevarte y contribuir a manifestar el designio divino”.